'Chapa tu combi': el ascenso de la telenovela chicha

Culminó 'Chapa tu combi', un titulo que no pasó desapercibido y un peldaño más para la telenovela 'chicha' gracias al aporte de un grupo de villanos con 'características muy especiales'. No defraudó

Lima, 03 Marzo 2020, (Por: Richard Manrique Torralva / El Informante Perú).- Alabada, criticada, vapuleada, Michelle Alexander ha logrado posesionarse del horario estelar del prime time con cada una de sus producciones, unas más otras menos, todas han logrado obtener buenos índices de sintonía. No se equivoque, el título de telenovela chicha, no la etiquetamos nosotros, fue un tipo de público y cierto sector de la prensa que ha catalogado de esa manera a sus producciones. Algunos lo tildaron de esa manera en forma despectiva y es que, desde los tiempos de sus series autobiográficas (hoy tomadas también en otros países), hasta sus telenovelas actuales; sus producciones se han distinguido por el estribillo de la cumbia, los parajes populares y el romance coloquial que la diferencia de otras producciones locales, tal vez, mejor realizadas pero con poca aceptación popular.

Estamos seguros que si hoy Panamericana Televisión fuera líder en sintonía (con Genaro Delgado Parker, por supuesto), ya se hubiera jalado a Michelle Alexander y Del Barrio Producciones quienes han tenido a lo largo de todos estos años de hegemonía; aciertos y desaciertos, pero no se le puede minimizar de ninguna manera. Es que, por uno y otro motivo, sus producciones saben llegar y entretener a su público objetivo, pese a las críticas de un sector de televidentes, tan proclive a folletines rosas, a las llamadas narconovelas o al deseo de realizaciones más culturales o históricas.

Lo que sí debemos entender es que, pese a todo, Michelle Alexander ha logrado encantar a un público cautivo que la sigue noche a noche, puntos más puntos menos, sus producciones sugieren una temática tan proclive a nuestra realidad que nada nos es indiferente.

Su última producción 'Chapa tu combi' nos devuelve el argumento más comercial y rentable, esa 'esencia chicha' hacia nuestra realidad local unida al ambiente convulsionado de nuestra Lima más caótica y más corrupta que nunca, la del siglo 21 que vivimos. Y es que, desde el título, ya sabemos lo que estamos por observar.

La historia (basada en la sinopsis oficial)

“Chapa tu combi” es una historia escrita por Eduardo Adrianzén y producida por Michelle Alexander. Nos cuenta el infortunado suceso por el que pasa Paloma de la Fuente (Daniela Feijoó), una joven huérfana que perdió a su pareja, Valentín Condori, (Gustavo Borjas) en una tragedia ocasionada por la informalidad, la explotación y el abuso. El joven fallece en un incendio al no poder escapar de su centro laboral porque se encontraba encerrado con candado. Paloma buscará justicia enfrentándose a quienes resulten responsables del hecho. Años más tarde, la joven se convierte en una periodista de investigación que busca atrapar a los culpables de la muerte de su enamorado.

Es en ese camino que encontrará el nuevo amor en Henry (Emanuel Soriano), un ingeniero forestal que intentará progresar frente a obstáculos sociales como la presión de las redes sociales.

Paloma, en busca de la verdad, encontrará a los culpables de su infortunio, los esposos Zorrilla, dueños de una flota de combis informales. Tanto Salomón (Miguel Álvarez) como Javiera Zorilla (muy bien Fiorella Díaz) han hecho su fortuna en base a coimas, excesos y asesinatos. Llenos de fortuna y poder apoyarán al nuevo congresista Benito Becerra (Pold Gastello) un corrupto político que busca su candidatura presidencial en un parlamento donde sus congresistas son, en su mayoría, tanto o más corruptos que él. Esos ‘padres de la patria’ no reparan en que la mayoría de pobladores busca que ‘el presidente moqueguano’ cierre el Congreso, pero ellos pretenden adelantarse al Ejecutivo planteando la vacancia. Paralelo a ello, Benito le pide a los Zorrilla vuelvan a su antiguo barrio para, desde ahí, empezar su campaña. En dicho barrio, viven los esposos, Gisela y Donald (Carolina Infante y Emilram Cossío), examigos de Salomón, quienes ocultan un secreto. Gisela fue la antigua novia de Salomón a quién abandonó cuando se enteró de sus fechorías. Pero a él, le diagnostican un cáncer terminal que lo unirá más a ella, sin saber que uno de los hijos mayores de Donald no es otro que su propio hijo.

Objetivo trazado

“Chapa tu combi” retoma el guión del personaje emprendedor que, con sus alegrías y tristezas busca salir adelante conviviendo con los problemas sociales y políticos que día a día pasa nuestro país.

El grupo de guionistas de Del Barrio Producciones plantea varias historias alrededor del tema central creado por Eduardo Adrianzén quien no se aparta de la temática y estilo de sus anteriores contenidos, el combinar la realidad política y social actual dentro de una ficción romántica.

De eso ya hemos hablado en otros artículos. Adrianzén no se aparta de lo que le da satisfacciones y en la que se siente más cómodo. Desde que apareció 'Los de arriba y los de abajo' (ATV. 1994), se crearon historias diferentes, aunque parecidas al formato original. La inflación, los paquetazos, la virgen que llora y el terrorismo de los noventa fueron reemplazados por 'los cuellos blancos', la disolución del Congreso y la inmunidad parlamentaria. El mototaxi de Chamochumbi fue reemplazado por las combis asesinas de los Zorrilla. Un país cada vez más complicado que sirve de base para la recreación de una tragedia producto de la explotación laboral y la desidia de aquellos que generan dividendos a costa de los demás.

Los villanos vuelven como protagonistas

El primer capítulo logra el interés deseado. Lo mejor, la buena química entre Daniela Feijoó y Gustavo Borjas. Lástima que fueron apenas dos capítulos. Alexander nos muestra a sus protagonistas, tal como cualquier limeño. El cantar en los micros y la afinidad romántica de ambos engrandece la trama, (con un bello fondo musical como la canción 'Te amare'). Por su parte, las imágenes del incendio en una galería (un aporte trágico de nuestra vida diaria), es muy logrado. El hecho que forme parte reciente de una tragedia local que conmovió a nuestra población no sólo le da actualidad al guión sino crea interés.

Al observar los capítulos de esta producción nacional no podemos dejar de seguir evocando el pasado y recordamos el estreno de 'Canela' (Panamericana Televisión. 1995). Luego del boom que significó 'Los de arriba y los de abajo', las producciones escritas por Adrianzén encontraron la fórmula perfecta para contrarrestar las novelas rosas de Panamericana, mejor estructuradas, con impecables presentaciones, buenos actores nacionales y extranjeros; pero sin ese sentir local urbano que nos presentaba las novelas creadas por Adrianzén que llegaban a un sector más amplio de televidentes, debido a que reflejaba nuestra realidad urbana en medio de una ficción.

Pero sigamos con 'Canela', telenovela que fue protagonizada, en nuestro país, por Astrid Gruber (la mamá de Scarlet Gruber) y nuestro galán y primer actor, Diego Bertie. Cómo las novelas escritas por Adrianzén, en este caso, ‘Los unos y los otros’ (ATV. 1995), mantenían ese estilo localista (hoy llamado chicha) fueron constituyendo un duro competidor para las producciones de Panamericana (llamadas a apoderarse del prime time de la época). Pero, esto no ocurrió así. Pese a que la producción de ATV no llegó ni por asomo a la sintonía de 'Los de arriba...'; sí fue un duro competidor y, obviamente, se repartieron la sintonía del rating estelar, lo cual constituyó un revés para Panamericana.

Además 'Canela' empezó tan ‘light’ y estilizado que ni villano tuvo generando todo tipo de críticas (una telenovela sin villano no es nada, pasa de manera intrascendente). Por tanto, fue llamada a ingresar, a dicha producción, la actriz Kathy Serrano quién brindó un papel memorable como villana (con los mismos estilos y caracteres que no tenían nada que envidiar a producciones mexicanas, argentinas y, en ese tiempo, venezolanas). Eso se observó, treinta capítulos después, donde no observábamos nada interesante en ‘Canela’ con lo que la sintonía se dividió y ATV (donde se emitían las telenovelas escritas por Adrianzén) seguía siendo el competidor a temer para Panamericana.

Todo esto recordamos al observar 'Chapa tu combi'. El tiempo ha pasado y las telenovelas chicha tan criticadas y, puede que, ninguneadas por un sector de televidentes, se han consolidado y han venido brindando mejoras dentro de sus contenidos.

En esta oportunidad, Adrianzén incluye a una familia muy singular, malévola, psicótica y excesivamente arrogante. Un grupo de villanos poco comunes. No recordamos una familia compuesta de esa manera dentro de la historia de las telenovelas.

Dicho clan familiar tiene a Javiera Zorrilla (Fiorella Díaz en gran actuación) como la mujer que conspira y trama todos los complots, venganzas, asesinatos y estafas. Fiorella sabe explotar al máximo su lado 'malo'. Nos entrega una caracterización, muy peruana, de una mujer irónica y déspota en sus tratos; a la vez que calculadora y egoísta, sin dejar su lado vengativo. Una actuación muy detallista, digna de resaltar.

A su lado, su esposo Salomón Zorrilla (personificado por el buen actor Miguel Álvarez), en dos entregas totalmente diferentes y claves para la concepción de la historia. Primero, Salomón convertido en un ser redimido, producto de una condena a muerte que lo humaniza, lo convierte en benevolente, arrepentido de sus actos y justo para con los demás.

La historia da un giro inesperado. Los partes médicos fueron cambiados. Su mejor amigo, Pocho Ugarte (Alberick García) fue el condenado, Salomón convencido de que todo se debió a un error burocrático, vuelve a su personalidad abusiva, prepotente y desalmada.

Sin duda, un momento imprevisible que pudo obtener mayor aceptación. Lástima que Miguel Álvarez no logra equiparar sus habilidades histriónicas, jamás hubo una diferencia actoral en las características del personaje que diferencie y refleje intensamente, en pantalla, ese desprendimiento y bondad con esa maldad y arrogancia. Una actuación, parecida, que me viene a la memoria es recordar a Hilda Abrahamz como María Clara y María Begoña Martínez en 'Abigail' (RCTV. Venezuela 1988). Observen las diferencias que aporta la actriz al interpretar a una mujer que derrocha bondad para luego mostrar a su 'gemela' tan malévola como despiadada. Otra actuación destacada es la de Gabriela Spanic (La Usurpadora. Televisa.1998). Los actores deben explotar al máximo sus expresiones y sentimientos cuando tienen que interpretar dos personajes tan poco parecidos.

Miguel Álvarez no logra redondear su papel, sale airoso por contar con una actriz como Fiorella Díaz, impecable hasta el capítulo final. Ambos como Salomón y Javiera constituyen una buena dupla histriónica, especialmente cuando él regresa a su verdadera personalidad. A su lado, sus hijas, (Briana Botto y Mónica Ross) tan desquiciadas como engreídas, consolidan a una familia que, pese a todo, generaron interés. Por cierto, el final de Clarissa ((Briana Botto) alucinando que observa a su familia más unida que nunca, celebrando el que sus enemigos hayan sido destruidos, es muy lograda y cierra el circulo familiar de manera imprevista.

Por el lado, de la familia Rubio Cortez. Los hijos de Donald y Gisela tuvieron momentos dispares. El menos atractivo, Edison (Augusto Gutiérrez) con una irregular dicción nunca pudo consolidar su personaje. La historia que protagonizó junto a Stephanie (Favia Arévalo) era lo menos atractivo de la trama. Los guionistas desperdiciaron una buena oportunidad para mostrar los problemas por los que pasa una pareja juvenil al ser padres. Lástima, pero ninguno mostró mejoras histriónicas, aparte el guión le ofreció casi una nula oportunidad de lucimiento.

Mientras tanto, Donald (Emilram Cosio) y su amor clandestino, Luchita (Ximena Díaz) lograron consolidarse, sobre todo en los últimos capítulos. El guión tuvo momentos intensos que no fueron bien explotados. Uno de ellos, constituye el velorio de Pocho y el momento de locura de Lucha quien expresa su amor incondicional a Donald delante de sus hijos y amigos. Una escena bien detallada, pero sin la fuerza narrativa que se requería para esos momentos de destapes imprevistos.

La parte bufonesca estuvo a cargo de Pold Gastello como el congresista Benito Becerra junto a su amante Merry Christmas (Stephanie Orúe) y el trio que componen junto a "Dudú" (Juan Carlos Rey de Castro). Este último no convence en su papel de gay coqueto, más bufonesco que histriónico. El partido político de Benito y sus tejes y manejes en torno a una posible vacancia al 'presidente moqueguano' causaba, por momentos, cierta hilaridad.

Sin duda, lo mejor de 'Chapa tu combi', se encuentra en el atractivo guión, con giros sorpresivos y el aporte de nuestra actualidad política y social (algo característico en las telenovelas de Del Barrio Producciones).

La historia tiene dos partes definidas muy atractivas y delineadas al gusto del televidente. El problema es que una historia así necesita un buen casting y, esta vez, los actores juveniles no dan la talla. El guión es clave y Eduardo Adrianzén sabe su oficio, nos ha entregado una historia que adaptada para otro mercado (sacando el concepto local, las referencias políticas y elaborando un mejor casting), no tendría nada que envidiar a otras producciones internacionales.

Hay momentos que, tranquilamente pueden generar sorpresa por los giros establecidos dentro de su trama (los 4 millones de los Zorrilla con la que pensaban comprar una curul del ‘partido amarillo’ fueron robados por un personaje no solo secundario sino el menos pensado). Una lástima que una escena así fuera tan limitada y sin la intensidad que el momento requería.

Por último el desenlace final, algo no tan previsible, aunque ya observado otras veces dentro de la historia de las telenovelas, siempre son bienvenidos. El hecho que Paloma sea hija de Javiera Zorrilla es el destape final, la ‘cereza en el pastel’, pero constituye otro momento para el olvido. El referente que recordamos es evocar a Endrina Lander (Astrid Carolina Herrera) enterándose que su madre es la persona que más odia en la vida (Emperatriz RCTV. 1990) o cuando Julia (la entonces adolescente, Victoria Ruffo) se entera que su madre verdadera es la persona que más desprecio le causa, Ana María (Jacqueline Andere) en 'Quiéreme Siempre’ (Televisa. 1981). Son conclusiones que se revelan en los últimos capítulos de cada historia, deben denotar lágrimas, dolor y felicidad. Aquí, pasa desapercibido con actores tan inexpresivos, carentes de un buen guía (director de escena) que les indique que esta parte es trascendente y por lo tanto debe mostrar intensidad y fuerza histriónica.

A pesar de esos detalles, 'Chapa tu combi' resulta una producción atractiva. El guión vuelve a salvar a la producción. La creatividad puesta de manifiesto al servicio de los villanos de turno, (un final muy efectivo). Estamos ante una historia que se engrandece con muy buenas tomas en exteriores, algunos diálogos efectistas (la mención al presidente moqueguano), las confesiones del ‘yo interior’ de algunos personajes como Luchita, ‘ustedes los hijos no saben lo apasionada que puede ser una mujer’ o la de Javiera: ‘En este país a las mujeres las maltratan, las matan’. Inclusive, muy sutilmente, los libretistas le inyectan el lado gay a la trama, convirtiendo al periodista incisivo Renato Fantosi con pareja homosexual (seguramente para estar a tono con los guiones internacionales de las telenovelas actuales). 'Chapa tu combi' resulta entretenida, no defrauda, constituye un ascenso más para las llamadas telenovelas chicha, hoy por hoy lo más atractivo.