MARÍA DE LOS ANGELES

Se encuentra ya en nuestras pantallas la nueva telenovela nacional llamada "María de los Angeles" con la que Iguana Producciones trata de enmendar la plana. Pese a, todo el producto es bueno aunque, debido al pésimo criterio del canal que lo transmite, los resultados en sintonía no la favorezcan. En todo caso "María de los Angeles" es superior a "Todo sobre Camila" y sobretodo a "La Mujer de Lorenzo" (de la misma unión comercial entre Iguana y Venevisión).

Lima, 28 Junio 2005.- "María de los Angeles" es la nueva telenovela de Iguana Producciones que intenta llenar el vacío que tienen este tipo de producciones en nuestras pantallas, actualmente plagada de teleseries cómicas que no tienen cuando acabar (salvo que el sagrado rating lo decida). Con todo, el equipo de Luis Llosa vuelve a ofrecernos un producto con algunos altibajos, pero en el que se nota un cuidadoso trabajo de producción.

Pues bien, la historia nos presenta a María (Melania Urbina) una campesina de un pueblo rural de Lima cuyo mayor deseo es triunfar como cantante folklórica (¿a que les recuerda eso?) sin embargo se cruza en su camino un joven emprendedor llamado Alberto (Carlos Caballero) de quien se enamora perdidamente y cuya unión se ve obstaculizada por sus otros dos pretendientes y por Vanessa, una joven doctora de la capital (Milene Vásquez) quien termina enamorándose de Alberto y que, con el correr de los capítulos, se convertirá en una villana enamorada capaz de hacer lo que sea, incluso pactar con la amante de su padre, con tal de obtener el amor de Alberto.

María es objeto del deseo malsano de Rogelio (Tulio Loza) quien termina violándola luego de doparla por lo que ella no recuerda quien fue la persona que la ultrajó y también sufre, sin saber, de los engaños e intrigas de Néstor (muy bien Leonardo Torres Vilar) el supuesto hijo de Rogelio que la ama en silencio pues María lo ve solamente como un buen amigo de la infancia. Producto de estas intrigas María y Alberto son separados en la capital mientras Vanessa pacta con Néstor para separar a esta pareja.

La historia pertenece a María Cristina Ribal, actriz peruana radicada muchos años en México y en cuyo país comenzó a escribir guiones para telenovelas e incluso logró que una de sus historias las produjera Televisa. Ahora en su patria vuelve con una historia tantas veces trillada, pero que tiene sus momentos de interés. Lo que nos llama la atención es el querer aprovechar el éxito que tuvo la miniserie de Dina Paúcar para hacer una historia parecida. Fuera de eso la novela se deja ver.

Melania Urbina convence como protagonista más por su experiencia como actriz que por su aspecto físico, el guión nos quiere hacer creer que María es un portento de mujer, objeto de los deseos de un empresario y de su supuesto hijo. Melania cumple con su papel a pesar de que el físico de niña mujer no ayuda a ser creíble, que pueda despertar tanta disputa entre tres hombres.

Mención aparte merece Carlos Caballero, desconocido por estos lares, pero con buen prestigio en Miami que no desentona a pesar del "terrible" dejo cubano que tiene, su rol del sufrido enamorado Alberto le sienta bien. Con ello nos recuerda lo que un maestro de la actuación nos decía recientemente: "un buen actor es aquel que logra encajar tanto como galán como también de villano" y Caballero nos convence tanto en "María de los Angeles" como sufrido enamorado como también en "Prisionera" como maquiavélico asesino.

De los actores de reparto agrada ver la vuelta de Mónica Domínguez a este tipo de producciones, Hernán Romero siempre en lo suyo desempeñándose bien en sus papeles, así como es grato ver a Amparo Brambilla mostrar progresos actorales y a Analí Cabrera lucir perfecta como la amante del padre de Vanessa.

¿Y Tulio Loza? Al cholo de acero inoxidable le pasa igual que a Caballero no puede con su dejo folklórico, pese a sus esfuerzos, su interpretación le sale más a un "Nemesio Chupaca herido en su hombría" que a un pérfido villano, tal vez, por ello no redondee en su papel de malo, nos resulta un poco fingido su rol, mejor estaba en "Amor Serrano" y ¿saben a que se debe esto?, simplemente porque en la producción de Michel Gómez estaba en lo suyo, haciendo de cholo bueno e incrédulo, aquí se porta como un villano al que le falta crueldad y hasta carece de esos tics actorales que le dan tanta personalidad a un personaje. En la escena de la violación de María, por ejemplo, resultó ser más simplista que los televidentes no nos provoca ninguna cólera este personaje, mejor esta Leonardo Torres Vilar como Ernesto ni se esfuerza en actuar, es un papel hecho a su medida. Al cholo Loza lo debieron preparar mejor, tal vez en ello radique que a los televidentes no les provoquen mucho seguir con la historia.

Uno de los aciertos es escuchar la bella canción de Dino "Te amo demasiado" como tema principal de la telenovela brillantemente interpretado por Roxana Valdivieso y Jorge Choi. Tan provocativo es la presentación que ni nos interesa que Melania solamente realice el playback de la canción.

Por cierto Iguana dobletea con dos producciones en nuestras pantallas (en la tarde pasan ese bodrio llamado "Todo sobre Camila" donde lo único bueno es observar los progresos de Bernie Paz) y en ambas se observará la diferencia que existe entre uno y otro. Aquí cuenta Iguana con todo su equipo (Margarita Morales, y Michelle Alexander a la batuta) que logran un buen producto que, cierto es, no tiene buena sintonía por el pésimo criterio de programarlo a las siete de la noche y no a las nueve como se esperaba aprovechando el éxito de "Chacalón". Sin embargo nos deja la sensación que tanto Milene Vásquez como Melania Urbina están para roles protagónicos. Lástima que por el éxito de producciones como "Así es la vida" nuestros productores para subsistir tengan que "crear" un mismo producto para competir con la producción de Efraín Aguilar (¡que pena que Michel Gómez haya tenido que producir ese fiasco llamado "Los del solar"!) y por la falta de presupuesto y un poco de creatividad no realizar este tipo de producciones. Por ahora Iguana corre en solitario, esperemos que se sigan haciendo producciones de este tipo porque solo la competencia y el continuismo en el negocio telenovelero harán que esto, alguna vez, pueda cambiar.