EL INGRESO DE RAFAEL NOVOA EN "MAÑANA ES PARA SIEMPRE" Y ALGUNAS DIFERENCIAS CON EL ORIGINAL COLOMBIANO
El actor colombiano Rafael Novoa junto a Silvia Navarro en el capítulo final de "Mañana es para siempre" que entra a sus capítulos cruciales en Perú. Foto: Diario El Tiempo- Colombia.
Lima, 14 Julio 2009, (Por: Richard Manrique Torralva / El Informante Perú).- Finalmente "Mañana es para siempre" entra a sus capítulos cruciales en el Perú mientras, para los que lo ven a través del cable, ingresa a sus capítulos finales. Por cierto, en México ya culminó su emisión y ahora es justo cumplir lo que habíamos prometido en anteriores comentarios. Hacer un paralelo entre "Pura sangre" y su clon mexicano teniendo en cuenta que ambas producciones se emitieron en Perú en señal abierta y hasta, en algún momento, coincidieron en sus respectivos horarios. (La original colombiana llegaba a su final por ATV mientras su clon mexicana comenzaba a emitirse por América Televisión).
EL GALÁN DE PURA SANGRE LLEGA A MÉXICO
Finalmente el productor Nicandro Díaz agregó algunos capítulos más a la trama aunque no el esperado. Eso sí, hasta la mitad de los mismos todo seguía siendo casi un remake de su par colombiana, pero en los momentos cumbres, propios de su bien elaborado guión, la cosa parece diferenciarse.
Uno de ello es el ingreso de Rafael Novoa (Eduardo Montenegro en Pura Sangre). El actor fue convocado por Televisa para participar en los momentos finales de la trama como una participación especial dentro de la telenovela, a pesar que ya se sabía que Novoa era casi un desconocido en México, pero el productor Nicandro Díaz buscaba no solo diferenciarse de la trama sino también asegurar sintonía en el mercado internacional. Díaz sabía que "Pura Sangre" no pasó desapercibida en muchos países y que, gracias a ello, el rostro de Novoa era más que conocido, no así en México. Pero estratégicamente, dada su condición de galán lo coloca como rival de Eduardo Juárez / Franco Santoro y con ello aumenta el interés por la trama.
Debemos indicar que la participación de Novoa tuvo buenos comentarios en México y eso le puede asegurar futuras inclusiones en otras producciones de Televisa. El actor personificó a Miguel Lascuraín, el amigo de universidad de Fernanda Elizalde (Silvia Navarro), el papel que hacía Marcela Mar en Pura Sangre, y que, gracias a ello, permanece hasta el desenlace final de esta telenovela que también difiere con la de su par colombiana.
Nosotros solamente diremos que Nicandro Díaz la acertó en mucho porque Novoa no desentona en lo absoluto y como decimos los peruanos "mató dos pájaros de un tiro" porque ante la orfandad de galanes en tierra aztecas, Novoa era el complemento perfecto para un rival de Colunga dentro de la trama y además porque complace a los televidentes de afuera que sí conocen a Novoa, manteniendo el interés en suspenso constante.
ALGUNAS DIFERENCIAS MÁS
Recordemos que Pura Sangre es una telenovela colombiana producida por RCN Televisión y está protagonizada por Marcela Mar, Rafael Novoa y Kathy Sáenz Es una historia original compartida por Mauricio Navas, Guillermo Resptrepo, Conchita Ruiz y Tania Cárdenas cuyos derechos de Autor de la obra original pertenecen a la propia RCN Televisión. Nicandro Díaz, el productor mexicano se interesó tanto por su historia que hasta fue a los estudios donde se filmaban los últimos capítulos de la telenovela y allí aprovechó para contactar con Rafael Novoa para proponerle desde ya una participación especial en la trama mexicana.
La villana de turno en Pura Sangre es Paulina (Bárbara Greco de Elizalde / Rebecca Sánchez en la versión mexicana), quien se convierte con el correr de los capítulos en el eje central porque gracias a este personaje el interés aumenta merced a sus intrigas y maldades y por su cambio de personalidad (más en la versión colombiana que la mexicana), al conocer que su hija vive. Paulina mata a diestra y siniestra. No sucede ello, con el personaje de Lucero quien a pesar de interpretar a una mujer convertida en villana por las circunstancias de la vida, logra una buena compenetración con la historia aunque carece de tantas muertes como las que tiene su predecesora colombiana.
El cura juega un papel fundamental dentro de la producción colombiana. Ya hablaremos de ese personaje cuando analicemos la telenovela mexicana en su conjunto. Solo diremos que el gran Luis Gimeno en el papel del Padre Bosco en la versión charra carece del sentir y la fuerza protagónica que le puso su predecesor colombiano personificado por el actor Diego Vélez como el Padre Matías en Pura Sangre. Al cura Bosco en "Mañana es para siempre", lo suavizan demasiado.
Según la historia, en Mañana es para siempre, son 15 años los que transcurren, mientras que en Pura Sangre son 17 los años transcurridos.
En Pura Sangre, la producción tenía la fuerza y ese sentir que dejan las producciones brasileñas con un final melancólico (la muerte del patriarca de la familia), mientras que en su par mexicana el final, es propio de sus producciones, todo termina en el clásico matrimonio soñado con su final feliz respectivo.
Por último la versión colombiana pecaba en austeridad a pesar de sus bellas locaciones en el interior de Bogotá y carecía de una buena música incidental que aportara a una mejor visualización de la trama. Pero, a pesar de dichas carencias, el producto levantaba porque el guión era muy atractivo. Eso lo percibió, desde el arranque, Nicandro Díaz, por ello su interés en adquirirlo para finalmente producir esta producción mexicana que derrocha espectacularidad y bellos escenarios, propios de una producción realizada por Televisa.
NOVOA EN MÉXICO
Rafael Novoa se sintió satisfecho de trabajar en México. El actor ya se encuentra en Colombia donde graba "Las trampas del amor", novela recientemente lanzada en el país de la cumbia y donde tiene el rol de antagónico.
Con respecto a ambas producciones en la que él tiene el privilegio de haber participado, Novoa, sostuvo que, aunque la esencia de la historia es la misma, es un producto distinto, algo que suele ocurrir cuando un país adapta una novela. “Creo que es otro punto de vista diferente” finalizó.
(*) rmanrique@elinformanteperu.com
http://www.elinformanteperu.com/
Lima, 14 Julio 2009, (Por: Richard Manrique Torralva / El Informante Perú).- Finalmente "Mañana es para siempre" entra a sus capítulos cruciales en el Perú mientras, para los que lo ven a través del cable, ingresa a sus capítulos finales. Por cierto, en México ya culminó su emisión y ahora es justo cumplir lo que habíamos prometido en anteriores comentarios. Hacer un paralelo entre "Pura sangre" y su clon mexicano teniendo en cuenta que ambas producciones se emitieron en Perú en señal abierta y hasta, en algún momento, coincidieron en sus respectivos horarios. (La original colombiana llegaba a su final por ATV mientras su clon mexicana comenzaba a emitirse por América Televisión).
EL GALÁN DE PURA SANGRE LLEGA A MÉXICO
Finalmente el productor Nicandro Díaz agregó algunos capítulos más a la trama aunque no el esperado. Eso sí, hasta la mitad de los mismos todo seguía siendo casi un remake de su par colombiana, pero en los momentos cumbres, propios de su bien elaborado guión, la cosa parece diferenciarse.
Uno de ello es el ingreso de Rafael Novoa (Eduardo Montenegro en Pura Sangre). El actor fue convocado por Televisa para participar en los momentos finales de la trama como una participación especial dentro de la telenovela, a pesar que ya se sabía que Novoa era casi un desconocido en México, pero el productor Nicandro Díaz buscaba no solo diferenciarse de la trama sino también asegurar sintonía en el mercado internacional. Díaz sabía que "Pura Sangre" no pasó desapercibida en muchos países y que, gracias a ello, el rostro de Novoa era más que conocido, no así en México. Pero estratégicamente, dada su condición de galán lo coloca como rival de Eduardo Juárez / Franco Santoro y con ello aumenta el interés por la trama.
Debemos indicar que la participación de Novoa tuvo buenos comentarios en México y eso le puede asegurar futuras inclusiones en otras producciones de Televisa. El actor personificó a Miguel Lascuraín, el amigo de universidad de Fernanda Elizalde (Silvia Navarro), el papel que hacía Marcela Mar en Pura Sangre, y que, gracias a ello, permanece hasta el desenlace final de esta telenovela que también difiere con la de su par colombiana.
Nosotros solamente diremos que Nicandro Díaz la acertó en mucho porque Novoa no desentona en lo absoluto y como decimos los peruanos "mató dos pájaros de un tiro" porque ante la orfandad de galanes en tierra aztecas, Novoa era el complemento perfecto para un rival de Colunga dentro de la trama y además porque complace a los televidentes de afuera que sí conocen a Novoa, manteniendo el interés en suspenso constante.
ALGUNAS DIFERENCIAS MÁS
Recordemos que Pura Sangre es una telenovela colombiana producida por RCN Televisión y está protagonizada por Marcela Mar, Rafael Novoa y Kathy Sáenz Es una historia original compartida por Mauricio Navas, Guillermo Resptrepo, Conchita Ruiz y Tania Cárdenas cuyos derechos de Autor de la obra original pertenecen a la propia RCN Televisión. Nicandro Díaz, el productor mexicano se interesó tanto por su historia que hasta fue a los estudios donde se filmaban los últimos capítulos de la telenovela y allí aprovechó para contactar con Rafael Novoa para proponerle desde ya una participación especial en la trama mexicana.
La villana de turno en Pura Sangre es Paulina (Bárbara Greco de Elizalde / Rebecca Sánchez en la versión mexicana), quien se convierte con el correr de los capítulos en el eje central porque gracias a este personaje el interés aumenta merced a sus intrigas y maldades y por su cambio de personalidad (más en la versión colombiana que la mexicana), al conocer que su hija vive. Paulina mata a diestra y siniestra. No sucede ello, con el personaje de Lucero quien a pesar de interpretar a una mujer convertida en villana por las circunstancias de la vida, logra una buena compenetración con la historia aunque carece de tantas muertes como las que tiene su predecesora colombiana.
El cura juega un papel fundamental dentro de la producción colombiana. Ya hablaremos de ese personaje cuando analicemos la telenovela mexicana en su conjunto. Solo diremos que el gran Luis Gimeno en el papel del Padre Bosco en la versión charra carece del sentir y la fuerza protagónica que le puso su predecesor colombiano personificado por el actor Diego Vélez como el Padre Matías en Pura Sangre. Al cura Bosco en "Mañana es para siempre", lo suavizan demasiado.
Según la historia, en Mañana es para siempre, son 15 años los que transcurren, mientras que en Pura Sangre son 17 los años transcurridos.
En Pura Sangre, la producción tenía la fuerza y ese sentir que dejan las producciones brasileñas con un final melancólico (la muerte del patriarca de la familia), mientras que en su par mexicana el final, es propio de sus producciones, todo termina en el clásico matrimonio soñado con su final feliz respectivo.
Por último la versión colombiana pecaba en austeridad a pesar de sus bellas locaciones en el interior de Bogotá y carecía de una buena música incidental que aportara a una mejor visualización de la trama. Pero, a pesar de dichas carencias, el producto levantaba porque el guión era muy atractivo. Eso lo percibió, desde el arranque, Nicandro Díaz, por ello su interés en adquirirlo para finalmente producir esta producción mexicana que derrocha espectacularidad y bellos escenarios, propios de una producción realizada por Televisa.
NOVOA EN MÉXICO
Rafael Novoa se sintió satisfecho de trabajar en México. El actor ya se encuentra en Colombia donde graba "Las trampas del amor", novela recientemente lanzada en el país de la cumbia y donde tiene el rol de antagónico.
Con respecto a ambas producciones en la que él tiene el privilegio de haber participado, Novoa, sostuvo que, aunque la esencia de la historia es la misma, es un producto distinto, algo que suele ocurrir cuando un país adapta una novela. “Creo que es otro punto de vista diferente” finalizó.
(*) rmanrique@elinformanteperu.com
http://www.elinformanteperu.com/
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